domingo, 20 de septiembre de 2015

OPINIÓN SOBRE LA HUELGA DE EXAMINADORES DE TRÁFICO

Antes de empezar este post quiero decir que estoy de acuerdo
con la mayoría de reivindicaciones del Colectivo de Examinadores de Tráfico
y que no apoyo su huelga.

Tienen todo el derecho a realizarla y el lícita,
pero en  el momento que nos encontramos la hace inoportuna:

- A tres meses de las Elecciones Generales
no van a conseguir sus reivindicaciones.
Esperar al nuevo Gobierno sería lo razonable.

- Los mayores afectados somos los Centros de Formación Vial,
(ya muy tocados por la crisis),
los Profesores de Formación Vial
y los aspirantes a obtener el Permiso de Conducir.
La DGT, (que es a los que pretenden presionar), ni se van a despeinar.

- Están alimentando la pretensión de unos pocos
de Privatizar los Exámenes de Conducir.
La Evaluación Vial debe de seguir siendo un Servicio Público,
para que continúe con su Independencia y Objetividad.
La Evaluación Vial no puede ser un Negocio Privado.

- Es cierto que la Directiva Europea 2006/126/CE, en su Anexo IV,
no les obliga a dar el resultado In situ,
pero el Reglamento General de Conductores en su Anexo VIII, Sí.

Dice la Directiva 2006/126/CE, en su Anexo IV, que habla de las Cualificaciones Mínimas para las personas encargadas de la Realización de Exámenes Prácticos
de Conducción, entre otros puntos:


1.5 Capacidad de conducción personal:

— Las personas autorizadas a realizar exámenes prácticos para una categoría de permiso de conducción deberán poder conducir con el elevado nivel de pericia necesario el tipo de automóviles de que se trate.

1.6 Calidad del servicio:

— determinar y comunicar qué puede esperar el candidato durante el examen;

— comunicar con claridad, eligiendo un contenido, un estilo y un lenguaje adaptados al público y el contexto y tratar las preguntas de los candidatos;

— facilitar explicaciones claras sobre el resultado el examen;

— tratar a los candidatos de manera respetuosa y sin discriminaciones.

En el Reglamento General de Conductores, Anexo VIII:

A) Condiciones que debe reunir el personal examinador:


4. Capacidad de conducción personal:
- Deberá estar habilitado para la conducción del tipo de automóviles

a los que autoriza la clase de permiso de conducción

a la que el aspirante desea acceder.

5. Calidad del servicio:
Durante el desarrollo de las pruebas, el examinador deberá:
- Tratar al aspirante de manera respetuosa y no discriminatoria.
- Dar explicaciones claras sobre el resultado de la prueba.
- Dar las instrucciones precisas, con claridad, utilizando un lenguaje 
que sea fácilmente comprensible para el aspirante.

No se puede tolerar NI UNA AGRESIÓN AL PERSONAL EXAMINADOR, NI UNA.
Son unos hechos GRAVÍSIMOS.
Pero no son Generales.
¿Cuántas pruebas hay al día y cuántas Agresiones?
Aunque insisto,
no se puede tolerar NI UNA AGRESIÓN AL PERSONAL EXAMINADOR, NI UNA.
No creo que la solución sea entregar el resultado "a posteriori".
La solución viene por entregar los resultados en lugares seguros,
como pueden ser las instalaciones de la DGT, Ayuntamientos, etc.
Y que estas estén custodiadas por las Fuerzas de Seguridad del Estado
o Municipales.
Hay que solicitar seguridad, no modificar nuestro protocolo de trabajo.


- No falten a la verdad.
Los Profesores de Formación Vial ni presionamos a los Examinadores,
ni queremos la Privatización de los Exámenes, ni nada parecido.

- El trabajo que realizan ustedes es muy parecido al nuestro.
Nosotros también impartimos nuestras clases al aire libre,
con desgaste físico, psíquico, y con peligro.
Pero lo hemos aceptado y elegido libremente.

- Les pediría un poco más de confianza en los Profesores de Formación Vial.
Ni que fueran ustedes solos con los alumnos que evalúan.
Les recuerdo que al doble mando nos encontramos los Profesores,
que somos los Conductores y los Responsables de la Conducción
A TODOS LOS EFECTOS DE LA LEY.
¿Cuál es el porcentaje de Siniestros Viales durante las pruebas de Evaluación,
o durante las Horas Lectivas?
Ya le digo yo que es bajísimo.
Y con esto no quiero decir que no se merezcan una mejor retribución económica
por el trabajo que realizan, pero no es precisamente por la peligrosidad,
sino por la importancia que tiene la Función Básica que desarrollan.

- Es cierto que la Evaluación Vial es un Proceso muy importante
dentro de la Formación Vial.
Pero les recuerdo que el grueso de la Formación Vial
la realizamos los Profesores de Formación Vial.
Ustedes únicamente Evalúan esta Formación y tienen la última palabra
y deciden si el aspirante es merecedor del Permiso de Conducir.
Cuando defiendan sus reivindicaciones, hablen del Servicio de Evaluación,
y de como mejorarlo.



- Los Profesores de Formación Vial tenemos que poseer una Formación y unas condiciones laborales dignas, es cierto, pero los Evaluadores también.

- El número de pruebas que tienen que realizar es muy elevado.
Con tal trabajo no se puede ofrecer Calidad.

- Todos y todas los que nos dedicamos a la Seguridad Vial
hemos de mejorar constantemente.

- La coordinación y colaboración entre nosotros es muy necesaria.
Cualquier desfallecimiento en algún eslabón de la cadena
afectaría al conjunto.

- Los Centros y Profesores de Formación Vial
debemos apoyar sus reivindicaciones, pero no la Huelga.
No hemos de organizar movilizaciones a favor de uno o de otro.
El problema es entre los Examinadores de Tráfico y la DGT.
Tenemos que mostrarnos neutrales.
Posicionarnos de un lado o de otro sería un error.


Espero que consigan la mayoría de sus reivindicaciones,
Señores/as Evaluadores/as de Tráfico,
en pos de la mejora en la Seguridad Vial.

Y más pronto que tarde.


Sábado, 19 de Septiembre de 2015

Sobre el momento actual en el que se encuentra
el Servicio de Formación Vial de la DGT


Los profesionales examinadores, a la vista de la situación del Servicio Público de Exámenes, creemos que ha llegado el momento en que necesita una urgente y necesaria reestructuración, ya que no funciona
ni ofrece el servicio de calidad que a los funcionarios examinadores nos gustaría.


Una de las premisas fundamentales que nos ha impulsado a organizar estas protestas ha sido que se revise por completo todo el sistema de pruebas del permiso de conducir y solucionar aquellos apartados que no funcionan o no están dando el resultado que la sociedad requiere.

Ya son muchos los colectivos que están mostrando su malestar por la desorganización y disfuncionalidad actual del servicio público de exámenes: protestas de autoescuelas como recientemente en Valencia, presiones para privatizar el servicio por parte de la patronal del sector, creación de plataformas de autoescuelas en Barcelona, etc...

Además, nunca antes los profesores de formación vial habían tenido unas condiciones laborales tan malas como hoy en día; y es algo que a los funcionarios examinadores, como profesionales y también como ciudadanos, nos preocupa, porque la formación debe ser una cuestión fundamental y prioritaria en cualquier sociedad medianamente avanzada. 

Los profesores que la imparten, además de estar bien formados, deben contar con unas condiciones dignas para realizar su trabajo; condiciones que ahora no se dan, en parte, por la mala gestión que se está haciendo desde Tráfico.

Y para más abundamiento al descrédito actual del organismo de Tráfico, pocas veces en la historia se ha movilizado el colectivo examinador en número tan importante y en una proporción de jefaturas tan alta para protestar por la gestión que se hace del servicio de exámenes. 

Los examinadores hemos visto con impotencia el desprestigio de la profesión sin que la DGT, principal responsable, haya hecho el más mínimo movimiento para solucionar las cosas:


1.              Sobre la reducción del número de pruebas


Es casi imposible realizar 13 circulaciones teniendo en cuenta el protocolo de calidad. 
Creemos que es un buen protocolo y así lo pensamos en el colectivo porque supuso una mejora importante en la manera de realizar las pruebas; pero quedó en eso, en un principio.

Según nuestro punto de vista profesional, este protocolo debería haber avanzado corrigiendo aquellas partes que no funcionan y desarrollando otras fundamentales. 

Nada se ha hecho. 
Es más, consideramos una insensatez que los que realizamos este trabajo a diario, hayamos sido apartados y ni siquiera se nos pregunte sobre la mejora del mismo.

Los funcionarios examinadores estamos en contacto directo con la circulación, y con toda seguridad, tenemos mucho que aportar. 
Lamentablemente, toda esta experiencia con la que hubiéramos podido contribuir a una mejora de la seguridad vial, no ha sido requerida en ningún momento.

El número de pruebas adecuado se podría estudiar e implantar según disponibilidad y no cerrarse en banda a cualquier mejora que sin duda, redundaría en un mejor servicio.

2.              Dar el resultado en diferido

El protocolo debe tener en cuenta las condiciones en las que los examinadores realizan sus funciones.

La realidad es que sentimos auténtica inquietud a la hora de comunicar el resultado de las pruebas, debido a las muchas agresiones verbales y físicas que se producen. 

Es un problema serio que causa gran alarma entre los funcionarios 
y la DGT no está tomando ninguna medida para solucionarlo.

Nuestra propuesta consiste en dar la explicación al aspirante, que consideramos necesaria, pero sin darle el resultado final, que se podría dar en otro momento o por otros medios.

Además, se podría valorar realizar cursos formativos que ayudaran en estas situaciones, y otras medidas como encontrar zonas seguras, etc.

3.              Aumento del Complemento Específico

La realidad es que ahora mismo,
nadie quiere ser examinador porque no se compensa económicamente la penosidad y peligrosidad de nuestro trabajo.

Nuestra retribución debe estar acorde a la responsabilidad y alta trascendencia de nuestras funciones y ahora no lo está.

Una solución podría ser que, mientras se pronuncie la CECIR, la DGT podría encontrar mecanismos con recursos propios para retribuir las especiales condiciones de este puesto.


4.              Defensa del Carácter Público de los Exámenes de Tráfico

Queremos saber los planes del organismo para este servicio público, ya que formamos parte de él y consideramos que debemos ser parte activa del presente y futuro del mismo.

Para paliar el número insuficiente de efectivos, se podrían buscar fórmulas como las oposiciones propias, a las que pudiesen acceder todas aquellas personas que por vocación y formación quisieran ser funcionarios examinadores.

Muchos de nosotros llevamos en este organismo toda nuestra vida laboral y consideramos a la DGT como nuestra también; pero en los últimos años, los responsables del organismo nos han apartado por completo de cualquier mesa de trabajo que redunde en la mejora del organismo y de las actividades profesionales que realiza. 

Nosotros somos profesionales y seguro que podemos aportar conocimientos y experiencias valiosas para la marcha del servicio. 

La realidad es que desde hace tiempo no se nos toma en la más mínima consideración.
Creemos que ahora es el momento adecuado para realizar cambios profundos en el servicio de exámenes. 

Así no puedes seguir. 

Es necesario que la propia Subdirección de Formación empiece a vernos como evaluadores y no sólo como meros anotadores de faltas.

Nuestra propuesta en este punto consiste en crear un grupo de trabajo encaminado a aumentar la calidad del servicio yen el que se pueda escuchar y tener en cuenta nuestra experiencia y nuestros conocimientos como profesionales.

Consideramos además fundamental en el buen desarrollo del servicio el tema de las inspecciones de los centros colaboradores. 

Es imprescindible un control y seguimiento de los distintos procesos que ahora mismo no se hacen, sea por falta de efectivos, de organización, o de todo un poco.

No entendemos tampoco, y así lo hemos manifestado en numerosas ocasiones, que se apueste por la seguridad vial y se permita que un posible primer permiso, como el AM, se pueda obtener sin formación ni demostrar conocimientos prácticos. 

Y tampoco entendemos que con tres años del B se pueda llevar una motocicleta. 

Países de nuestro entorno, como Inglaterra, ya no lo permite; ha comprobado que no tiene ninguna lógica.
¿Y aquí?

Cada uno de los puntos expuestos son negociables, pero irrenunciables para el colectivo examinador.

Creemos que el colectivo examinador quiere y merece unas mejores condiciones laborales, un reconocimiento a las importantes labores que realiza y una gestión más adecuada en aras a una mejora de la seguridad vial, que es lo que queremos todos.




Sábado, 10 de octubre de 2015


Comunicado de prensa del comité de huelga de los Examinadores de Tráfico


El Comité de huelga formado por representantes de ASEXTRA, CGT, CSIF y USO, ante las declaraciones del secretario general en distintos medios de comunicación debemos aclarar lo siguiente:


1.- En la reunión del pasado 22 de septiembre no se hizo propuesta alguna por parte de los técnicos presentes al comité de huelga que había sido convocado de urgencia precisamente por la propia DGT. Los responsables de Tráfico se limitaron a decir lo que ya sabemos.

2.- Se dijo que sobre el aumento de retribuciones que la DGT no podía hacer más de lo que ya había hecho y que sólo quedaba esperar. Hace una semana, en un comunicado de la propia DGT se dice que la directora general va a gestionar una reunión con el director de Función Pública para tratar este asunto. Entonces, ¿se ha hecho todo lo posible o no se ha hecho todo lo posible? ¿Se puede hacer más? Evidentemente sí. La directora general no ha mostrado el más mínimo interés ni antes ni ahora.

3.- Sobre la entrega de resultado dice el Sr. Cremades que la DGT hace lo que obliga la normativa europea y no es así, porque en Francia se envía el resultado de la prueba práctica por correo postal al día siguiente o a las 48 horas. De hecho, en la reunión con el comité de huelga, la señora Marta Carrera, subdirectora de Conocimiento Vial, hasta en tres veces afirmó que en Francia se daba el resultado in situ, algo que ya ha reconocido el propio secretario general que no es así.

La Directiva Europa no obliga a dar el resultado in situ como erróneamente mantiene la DGT, obliga a dar explicaciones, algo a lo que los examinadores no se niegan, pero el resultado se puede dar en otro momento distinto y por otros medios, como los electrónicos, por ejemplo.

Se dice que hay zonas seguras y no es del todo cierto. Sólo en Móstoles (Madrid) y en algún otro lugar de España.

Se llegó a decir por parte de la DGT que había más peligro en los puestos de oficina que en los nuestros.

Se afirma que se han dado cursos de resolución de conflictos pero no lo tiene ni el 10% de la plantilla de examinadores y no siempre la materia recibida está adaptada a nuestras circunstancias.

4.- Se indica que no quieren privatizar el Servicio. La cuestión es que no se cortan las especulaciones de la patronal de autoescuelas. Además, la dejadez y abandono de este servicio, no dotándolo de un número de personal adecuado, deja a las claras que no están apostando por el Servicio Público de Exámenes. (Se llegó a decir en la reunión que el número de examinadores era adecuado)

5. El secretario general no se ajusta a la verdad en cuanto a la carga de trabajo y es algo que indigna a todo el colectivo examinador porque no se puede manipular, tergiversar y faltar a la verdad en un tema que él sabe perfectamente que no es así.

Dijo ayer en el programa de Luis Herrero que ya se bajó hace dos años a 13 pruebas de 16 que había anteriormente. Efectivamente, pero se le olvida decir que obligaba la normativa europea al cambiar el sistema de examen y aplicar el protocolo de calidad que entre otras cosas, impide interrumpir la prueba salvo en casos excepcionales y muy tasados.

El secretario general de la DGT sabe de sobra y si no lo sabe, debería leer las normas que ellos mismos redactan, que según el Reglamento General de Conductores, el tiempo mínimo que debe durar la prueba para el permiso de clase B son 25 minutos, tiempo real mínimo de duración. El protocolo de calidad de los exámenes, que ellos mismos han elaborado, fuera del tiempo que hay que dedicar a la prueba de circulación debe realizarse la recepción del aspirante que engloba: presentación por parte del examinador, identificación del aspirante, acomodación del aspirante, comprobación del dispositivo acústico y óptico. Una vez realizado todos estos trámites el examinador dará una breve explicación sobre la prueba que se va a llevar a cabo, los objetivos que se pretenden y las circunstancias del desarrollo de la misma, en sus dos fases de conducción autónoma y dirigida. Seguidamente tenemos que realizar al aspirante unas comprobaciones previas o verificaciones técnicas.

Sr. secretario a partir de ahora es cuando comenzaría la prueba de control de aptitudes y comportamientos en circulación en vías abiertas al tráfico general, esos 25 minutos mínimos y se lo recordamos, mínimos.

Una vez finalizada la prueba de circulación el examinador dará explicaciones de lo acontecido en la misma y comunicará el resultado. A esto Sr. Secretario habría que sumar en el tiempo total que se necesita para evaluar a un aspirante las maniobras especiales que hay que realizar tal y como establece el Reglamento General de Conductores y que dicho sea de paso, ustedes lo han obviado en el protocolo de calidad de los exámenes. 

Antes ha habido que fichar la entrada a tu puesto de trabajo, recoger y ordenar documentación. También se tiene que bajar un alumno, subir otro, cambiar de vehículo o incluso ir al baño. ¿Cómo se atreve a decir que nos sobra tiempo?

Queremos dar un buen servicio al ciudadano y con el actual número de pruebas es materialmente imposible. Además, dicen que en la práctica hay pocos lugares que se llegue a ese máximo de 13, reconociendo implícitamente que no se ofrece calidad con tantas pruebas. Pedimos que se ponga por escrito y se reduzca el cupo diario por examinador y día a 12 como máximo.

El secretario general sabe de sobra que muchas de sus afirmaciones no son correctas y creemos que por el bien de la ciudadanía, debe dejar esa postura que no conduce a nada y solo hace confundir a la opinión pública. Consideramos que debe centrarse en buscar soluciones, visto que la directora general se ha desentendido por completo.

Este comité de huelga siempre ha estado y estará dispuesto a estudiar las propuestas que provengan de la DGT con el fin de desbloquear el conflicto. Eso sí, propuestas serias y mínimamente aceptables para los funcionarios examinadores que están luchando a diario por la dignificación de este puesto de trabajo y su reconocimiento profesional.