Editorial Vial. Alejandro Martínez. D.P.de P. y S.V.
La civilización es la victoria de la persuasión sobre la fuerza. Platón
Así describe Platón a la civilización y hoy en cuanto a Seguridad Vial: vemos día a día, repetir las mismas cosas de barbarie, eso que nos dio la evolución lo desechamos y lo olvidamos en un solo instante. En ese instante que huimos después de un accidente de tránsito y que dejamos una víctima, no sin auxilio que demanda la LEY para ser "Abandono".
Hablo de huir como base de una acción sin descripción, una especie de manera de liberar lo más recóndito de nuestro ser y más siniestro, en un acto, que muchos psicólogos, tales como : Erik Erikson Teoría del desarrollo de la personalidad , donde dice que desde los 13 / 14 años, el hombre debate entre :
Búsqueda de identidad vs. difusión de identidad
Comentan y describen los mecanismos, que lo llevan a huir o a atacar.
Sería muy larga esta explicación, pero es simple verla a diario, accidentes, choque, controles de Tránsito dónde los conductores huyen, sin importar las consecuencias, las cuales muy bien se describen en: Ley NACIONAL 24.449 y Ley PROVINCIAL :13.927 .
Se describe en ella agravantes para estos hechos, pero los agravantes mas graves son los sociales, no me voy a referir solo como lo mencioné a los penales. Los Humanos.
Vemos últimamente, en distintos hechos, una víctima atropellada y un victimario en huida. Dejando de lado todo lo humano, todo lo evolutivo, todo lo consiente, quiero creer hasta lo enseñado por sus padres, o sus educadores.
Huyen como bárbaros, perseguidos vaya a saber por qué multitud enardecida que los quiere ajusticiar?. No huyen por cobardía por instinto animal de preservación sin tener en cuenta que no son animales, sino humanos.
Huyen solo por qué no tienen la documentación necesaria?, como si la víctima no existiera tirada a su suerte sobre el pavimento. Como si no hay una sociedad, como si esa persona no podría ser un ser querido por el victimario.
¿Y para que huye?.
Lo más probable es que huya de sí mismo de su barbarie, de su inestabilidad social y emocional, de su propia sombra. Así pierde lo que tiene como persona, como miembro de una sociedad, parte de un contexto que se rige por leyes, por costumbres, por afectos, por terruño.
Lo malo es que cree que escapa de la justicia, de vez en cuando lo logran, después los vemos llorando y pidiendo disculpas, mintiendo a la justicia y los medios de cómo sucedió el hecho. En un micro radial, una periodista amiga, siendo yo el invitado, contó al aire, que sintió y como fue la pérdida de su madre en un accidente, por llamarlo de alguna manera. Y lo que más me dejó pensando en que bajo podemos caer de vez en cuando fue que: " cuando fue a la Comisaria: el victimario y su familia le gritaban a la cara que esa mujer, ( dijeron otra palabra) que circulaba caminando llevando su bicicleta, se le había cruzado a su hijito, menor, ebrio, sin papeles del rodado. También escuche de primera voz, otro hecho que una mujer fue víctima fatal y el victimario huyo con su moto , como si fuera un "Súper Héroe" perseguido por los malos. Los malos sería la Ley. Creo que no merece más palabras.
Huyen como dicen los psicólogos de seguro hay algún mecanismo interno que los motiva a olvidar su condición de humanos y sociedad.
Personalmente creo que huyen por motivos distintos, entre ellos, una gran falta de educación que alguien no les exigió que tuvieran, una falta de respeto que no les fue enseñado en el seno familiar o ellos decidieron olvidar o no dar importancia.
Cualquiera de las maneras que fue su actitud, merece un castigo por la Ley y una reprobación social importante; cualquier puede tener un accidente y ser víctima o victimario; lo que no puede hacer es dejar de lado su responsabilidad y huir. Eso es de animales, ante el miedo, pero deberán saber, que todos los sociólogos están casi de de acuerdo, que de algo no se puede huir, es de la conciencia y su propio yo, que tarde o temprano lo dejara sin razones para haber hecho tal ineptitud de parte de un ser humano a otro.
Tendrían que haberle enseñado a afrontar las responsabilidades y demás está decir que no hay pena de muerte, ni guillotina, ni nada que se le parezca, es más: No hay razón ni justificativo, el no tener la edad de conducir, o los papeles del rodado o moto, ni mucho menos haber sacado el vehículo sin autorización, es simple el por qué:
No hay ningún padre que felicite a su hijo por ello, teniendo conciencia social adecuada
Y si cualquiera que se llame y sea padre, reprobará haber dejado a una víctima inerte en el pavimento a su suerte.
Y la última no lo duden siempre alguien los ve, siempre alguien los conoce, y la ley los captura, como se ve a diario en los medios.
¿Huir para qué?
Para tener una pena por siempre en el alma, una condena por siempre en lo social, y algo que deja vacío la conciencia.
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