De un tiempo a esta parte diversas estadísticas oficiales e investigaciones científicas llegaron a la conclusión de la influencia que ejerce la edad como mudable moderadora de diferentes estados emocionales que se registran durante la conducción de vehículos automóviles.
Han encontrado una significativa relación entre la edad y la confianza o sensación de seguridad aunque los resultados de esta relación son contradictorios en las diversas investigaciones realizadas. En algunos casos, esta sensación de seguridad o confianza es más sobresaliente o destacada en los conductores jóvenes, aunque con frecuencia relacionada conuna elevada tasa de siniestralidad. En otras circunstancias, son los conductores senior, los que menos infracciones cometen y los que en menor número de siniestros viales se ven implicados. Entre las declaraciones de las diferencias encontradas en esta relación entre la confianza y la edad se puede mencionar: la forma de cuantificar la confianza, las actitudes, valores y creencias de la cultura a la que pertenecen los mencionados, de la misma forma el porcentaje de jóvenes y mayores utilizados en los diferentes estudios.
Podemos llegar a la conclusión de que “la confianza” con una conducción más segura, crece con la edad, tomando también como variable la “experiencia” del conductor.
Se puede deducir que tal vez los jóvenes son más confiados a consecuencia de su mayorpercepción de invulnerabilidad, mientras que los mayores pueden mostrar más confianza a consecuencia de su experiencia en la conducción de vehículos a motor.
Según algunas voces autorizadas, el sexo parece afectar, algunas veces, a la seguridad en la conducción (la confianza o estado de alerta), inclinándose en el sentido de que los hombres durante el manejo del vehículo van más atentos, seguros y en estado de atención, mientras que las mujeres, son más proclives a la distracción por mirarse en los espejos retrovisores, preocupación por su estética o elucubrar en sus quehaceres o labores domésticas.
Si bien, con la edad, a una mayoría de las personas mayores les disminuye su capacidad cognitiva, estos conductores realizan un mayor esfuerzo para mantenerse en estado de atención de los peligros en el tránsito y superar las dificultades que supone el envejecimiento de los humanos. En conclusión, la estrategia y capacidad pueden ser dos factores diferenciados sobre el estado de alerta o atención.
El género, según muchos comentarios de periodistas, parece afectar, como ya se ha dicho, de tal forma que los hombres son más proclives al estado de atención en la conducción que las mujeres.
Sin embargo, según estudios, independientemente de la edad. los hombres se inclinan a una mayor tendencia general a buscar sensaciones, emociones y aventuras, una mayor susceptibilidad al aburrimiento y mayor desinhibición (pérdida de auto-control). Hasta las mujeres caracterizadas por buscar nuevas sensaciones realizan elecciones más conservadoras que los hombres. Algunos investigadores aluden en la adquisición de roles para aclarar estas diferencias en la búsqueda de percepciones o emociones en hombres y mujeres. Desde esta perspectiva, las mujeres de forma gradual asimilan una preferencia por las situaciones de seguridad, mientras que los hombres se inclinan por situaciones más arriesgadas y peligrosas. Motivo por lo que las investigaciones en esta materia se centran más en los hombres.
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